El Negriazul necesitó 89 minutos de paciencia e intentos para mantenerse en lo alto al superar a un Macará anti espectáculo

En el primer tiempo, el Independiente del Valle salió despiadado y con todo para arremeter contra un Macará de Ambato que renunció por completo a la tenencia y al que le importó un pepino el espectáculo, con un planteamiento osco y pensando exclusivamente en el cero; y lo lograría. Eso después de un remate de Kendry Páez, una jugada en la que la propia joya se juntó con Lautaro Díaz, y finalmente un cabezazo a quemarropa de Cristian Zabala, que detuvo el arquero Correa. Después de aquello, el elenco visitante se desinfló por completo, y fue ahí cuando los de Alexandre Pallarés comenzaron a generar, hasta el punto de crear dos situaciones muy importantes, pero que sus delanteros desperdiciaron de forma increíble. Con el cero a cero se fueron a los vestuarios.

Lo del segundo tiempo fue la tónica del cierre de la primera. El elenco Celeste no tenía ningún apuro, y tampoco ninguna intención ofensiva, pero en frente tenía a un Negriazul incapaz y cada vez más debilitado mentalmente, debido a que todos sus intentos y variantes técnicas se estrellaban con una defensa que no se inmutaba; y que tampoco corría mayores riesgos. Es así que el marcador siguió sin moverse, ya ante una mirada e indicaciones cada vez más inquietas de un Javier Gandolfi al que también le ha sobrepasado el estar al frente de un equipo con todas las facilidades.

Ya en la recta final, el Independiente del Valle parecía bajar los brazos; además de la impotencia en el rostro de sus jugadores, estaba el peso del cansancio. Y es que los de Sangolquí lo intentaron, sin ideas y sin claridad en buena parte del compromiso, pero sí con esfuerzo. A los 89 minutos, gracias al último cambio que intentó su cuerpo técnico con la presencia de Renzo López en el campo, llegaría la explosión de cerca de mil hinchas del equipo que se hicieron presentes en el estadio. A la salida de un centro por derecha, a los 89 minutos de juego, el atacante uruguayo se elevó y marcó un golazo sumamente importante. Con eso, el elenco visitante no sólo celebraba, sino que mantenía la punta en la tabla de posiciones, apagando, a kilómetros de distancia, la fiesta que era el Monumental Banco Pichincha con el triunfo de Barcelona.

?? ¡LOCURA EN AMBATO! Renzo López convierte el 1-0 de IDV ante Macará, en el minuto 90+1. Parecía que los rayados perdían la punta, pero no.

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— ESPN Ecuador (@ESPNEcuador) May 26, 2024