El DT que es una leyenda para la gente del Bitri, rompe el silencio sobre su salida: “me hicieron sentir avergonzado”

"Faltó esa sinceridad de decirnos ‘no estamos de acuerdos con ustedes pese a que tienen un contrato. Y no hacer lo que pasó que nos hicieron sentir incómodos, avergonzados, por la inestabilidad que tuvimos que pasar. Tuvimos la oportunidad de irnos a otros equipos pero preferimos mantener el contrato con El Nacional, que habíamos hecho con la directiva anterior (de Lucía Vallecilla). Esa inestabilidad la teníamos día a día todos", inició Éver Hugo Almeida en diálogo con ‘Las Voces del Fútbol’ de radio Cobertura 104.1 FM, antes de revelar por qué empezó “mal” su relación con el actual presidente Marco Pazos, asegurando que no era que se mantenía fiel a Lucía Vallecilla, sino a El Nacional.

"Estaba caminando y me suena el teléfono, me dice que es el señor Marco Pazos que quería reunirse conmigo. Yo le dije que no creo que sea correcto porque era cuando iban a hacerse las elecciones. Le dije ‘yo me debo a la dirigencia actual y como estamos en elecciones, sería injusto para la gente que está pagándome el sueldo y dándome de comer, que yo vaya a hablar con usted. Ahí fue el primer choque donde no quedó mucha simpatía del lado del señor Pazos, que después me manifestó eso. Y ahí empezó el tema, quedó como que yo era fiel a la directiva de ese momento, y lógicamente debía ser así. El otro candidato (Washington) Andrade me llamó y le dije la misma cosa. Me parecía una traición, algo fuera de ética. Y ahí empezamos mal con el señor Pazos”, apuntó, para luego referirse a las 4 razones que le dieron desde la directiva para su salida.

“No me gustó la conversación que tuvimos con la comisión de fútbol, porque la decisión la tomó el presidente de la comisión de fútbol, Pablo Erazo. En su computadora (constaban las 4 razones) decía que (1era razón) por haber tenido una conexión con la directiva anterior. Después, porque no se pasó de la etapa de Copa Libertadores (2da razón), cosa que ellos ni estaban, ni existían en el conocimiento nuestro. Nosotros clasificamos a la Copa Libertadores el año pasado y ese dinero por clasificar, era para pagar a jugadores y cuerpo técnico. Y no se hizo, se utilizó para pagar el viaje (a Paraguay por la Copa Libertadores 2024), y se pagó un mes de sueldo. Ellos (Pazos y sus dirigentes) reclaman que no se pasó en la Copa. Y me culpan a mí de la derrota de esos tres partidos (seguidos por Serie A, siendo la 3era razón). Yo estaba en la tribuna (no lo habilitaron para que dirija desde el banquillo), venía gente tomada a estar cerca de nosotros, fumaban cerca de nosotros, vendían empanadas. Y no podíamos comunicarnos porque nos dieron walkie talkies pero eran de juguete. Y nos llegó a molestar, ¡no podíamos explicarles a los jugadores para qué iban a entrar!”, enfatizó.

“Cuando traen los 10 jugadores (refuerzos de Pazos), podíamos haber dicho que no, pero para no chocar aceptamos porque vimos que había buenos jugadores, pero la mayoría de ellos no son del estilo de juego de El Nacional, son del estilo de tenencia de pelota, son más lentos, había jugadores que hacía años, 2 años que no jugaban. Hay 6 jugadores que todavía no pueden ser utilizados. Ellos hablaron de mi salud (la 4ta razón). Y mi salud siempre estuvo impecable yo tuve una operación de la cadera, no tiene que ver con mi mente, con mi corazón o hígado, lo que estoy es un poco renguito pero mi salud está impecable”, complementó, antes de sentenciar: “¡Me mandaron a la guerra con un tenedor! No puedo hacer otra cosa. Esperemos que lleguemos a un buen acuerdo y que después no quedemos como los malos por hacer una denuncia a El Nacional, por respeto y los años que tenemos con El Nacional, deberíamos salir dándonos las manos. Esperemos que sea así. Me llamaron los chicos (jugadores) y casi lloramos todos juntos, porque me decían que me extrañaban y que no era lo mismo. Había jugadores que venían caminando, en bus, en patineta se tiraban en la bajada, y algunos fueron a Europa, a México, otros a equipos más grandes porque El Nacional es un grande también", culminó el Profe Almeida.